En Arahal (Sevilla) se ha abierto el primer museo dedicado a la figura de la mujer en el flamenco... a qué esperas para visitarlo.

sábado, 1 de diciembre de 2012

El Origen del Baile Flamenco

        Desde Heródoto de Halicarnaso, pasando por Estrabón, Marcial, Juvenal y Plinio El Jovén todos ellos han sido las fuentes donde han bebido los investigadores de la antigüedad para descubrir el origen más remoto del baile flamenco. La cuna del baile flamenco tiene su origen en las civilizaciones más antiguas.
        Ya en el antiguo Egipto se realizaban peregrinaciones a los centros religiosos, por lo visto, fueron los egipcios los primeros en celebrar fiestas religiosas colectivas, procesiones y peregrinaciones, de éstos aprendieron los griegos y posteriormente los romanos. En estas peregrinaciones religiosas, no faltaba la música, el cante y por supuesto el baile, todo acompañado por el consumo de vino desmesurado. Se cantaba y se bailaba acompañado por la flauta, por el batir de las palmas y por el repiqueteo de las castañuelas. Herederas de estas peregrinaciones religiosas son nuestras actuales romerías.
     No es casualidad que las primeras manifestaciones musicales fueran religiosas y que poco a poco se salieran de ese ámbito para convertirse en profanas. Los primeros sitios profanos donde se perpetúo estas manifestaciones artísticas fueron los banquetes, donde la música, el cante y el baile, sin olvidarnos del consumo del vino, se alejaba de su contenido y objetivo religioso.

       Serán en los banquetes romanos donde apareceren las famosas "Puellae Gaditanae". Fueron muy famosas en las cenas romanas, tanto en cantos y sobre todo en baile. Son diversos los investigadores que nos hablan de estas danzarinas dotadas de gracia, belleza y aptitud excepcional para el canto y la danza. Estas mujeres serían el legado bético de nuestras bailaoras andaluzas en la actualidad.
       Eran mujeres turdetanas, y eran conocidas en Roma por la zona de Gades (Cádiz), de ahí su nombre de "gaditanae", y por ser magníficas tañedoras de castañuelas ( realmente tocaban los crótalos antecedentes de las actuales castañuelas). Sus cantes y bailes eran de tono procaz y lascivo, complemento ideal para las cenas romanas.
  Son varios los investigadores que ven en estas bailarinas de la antigüedad, el origen de las características del baile flamenco. Ya que se movían con soltura, braceando, contoneándose con el mismo estilo que el actual baile flamenco, la única diferencia era que estas bailarinas tenían la misión de excitar a sus contempladores en los famosos banquetes romanos.

Algunos elementos de la sala del Baile del Museo.

        Estos estudios se completan con las fuentes arqueológicas a la perfección. Entre los investigadores parece predominar la opinión de que las "Puellae Gaditanae" tienen orígenes fenicios. Cádiz, colonia fenicia fundada hacia 1100 a.c,  se convirtió por su emplazamiento estratégico, en centro de acogida de humanos de cualquier procedencia, tranformándose en un centro de confluencias de culturas. Así Cádiz será una ciudad alegre, festiva, divertida, jocosa, licenciosa, descarada, desvergonzada; sonora y titineante, donde florece esa mercancía artística y carnal que hace las delicias de las cenas romanas: "Las Puellae Gaditanae".

     Libres o esclavas, es muy probable que formaran grupos o compañías para la explotación de su arte y virtudes carnales, y que recorrieran contratadas, las casas de esa sociedad romana dedicada a la fiesta. Dentro de la compañía habría "Vedettes" o primeras estrellas, una de las más famosas muy mencionada en época Imperial romana fue "Telethusa", inmortalizada por Rafael Alberti en uno de sus poemas.( En nuestro museo tenemos expuesto en la sala del Baile el poema de Rafael Alberti dedicado a esta  bailarina"Telethusa").

    Los ejemplos de restos arqueológicos son numerosos. Como ejemplo os menciono la terra sigilata del Museo Arqueológico de Jérez,  que representa a una danzante portadora de crótalos y unas manos que la jalean con su palmoteo, fechado entre los siglos I y II d.C. que coincide con el período de apogeo de las puellae de Cádiz.

   Entre las curiosidades de estos restos arqueológicos, mencionar la existencia de los primeros trajes de baile con volantes y de la aparición de los primeros complementos como peinetas y peinecillos en la indumentarias de estas bailarinas. Como muchas veces se ha dicho todo está inventado, pues sólo debemos mirar a nuestro pasado y comprobar que gran parte de lo que conocemos se originó en la antigüedad.



Imagen de Eva Hierbabuena en la Sala del Baile del Museo.

2 comentarios:

JESÚS MANUEL RUBIO dijo...

Hola lola:

De nuevo una vez más, te doy mi más sincera y profunda ¡Enhorabuena! por el trabajo que realizas en el museo de la mujer en el flamenco.

Gracias por acercar esta milenaria cultura a miles y miles de personas cada día.

Gracias a tu trabajo, y al de tu compañero acercais la vida y el cante de mujeres y hombres que lucharon por este maravilloso arte que es el flamenco de manera sublime; sobreviviendo a las adversidades del tiempo que les tocó vivir.

Gracias a ellos en nuestra memoria han quedado para siempre inolvidables interpretaciones y nombres imborrables como fueron:
Pastora Pavón, Pepe pinto, Antonio Mairena, Manolo Caracol. ect...

Te mando toda mi fuerza y cariño hacía tu persona y hacía tu magistral trabajo.

Millones de besos de tu buen amigo, JESÚSMA.

Lola Sánchez dijo...

Gracias querido amigo Jesúsma, nos alegra que con tu entusiamo y como buen aficionado al flamenco nos apoyes.Esperamos que sigas escribiendo tus maravillosas letras flamencas,¡¡¡Artista!!!!.

Es un honor tenerte como amigo.